-Y bueno ¿por que no sacan una baraja?, la tarde esta tranquila - pregunto y Ana se levanta, abre la habitación y un delicioso brazo solar entra por la puerta al mismo tiempo que una nube de tabaco sale deprisa siguiéndola.
Me detengo un momento, tomo mi cerveza y le encuentro un sabor alquitranado -deliciosa tarde, deliciosa- pienso, mientras, Andre besa a Adela con sus brazos y piernas entrelazadas. Llega Ana con el paquete de cartas en la mano y en la cara, como siempre, esa linda sonrisa con aire despistado, yo, simplemente mirándola, recostado boca abajo sobre su cama, sumergido en la cálida y cómoda atmósfera. Nos envuelve una sensualidad un tanto reprimida, un tanto prohibida pero que casi explota cuando Ana se sienta sobre mi espalda.
Sale el primer reparto de cartas. - Cinco cartas y gana la combinacion mas alta- dice Andre con un aire de vividor experimentado. Me toca un bueno juego: un par de cincos (uno de diamantes, uno de corazones) y tres cartas menores a nueve. Me toca jugar primero, leo mis cartas, tomo un cinco del centro de la cama y lo cambio por un tres y antes que todos (creo yo) tengo mi juego armado -toc toc, yo toco- digo muy seguro de mi y Ana desde su extraña pero deliciosa posición recrimina mi decisión. La pareja de enamorados reprimidos que tengo enfrente se desespera y toman su ultima carta intentando salvar sus juegos. Me toca bajar las cartas -full de cincos y par de sietes, Gane!- pero la mujer que esta sentada sobre mi espalda destruye mi sutil juego con una sonrisa que muestra sus dientes y cinco cartas mas altas que las mías.
La tarde ya empieza a caer y encedemos un par de velas. Continuamos el juego unas rondas mas hasta que se propone uno nuevo -21-. Inmaculado, Glorioso. Y de nuevo Andre con su aire de vividor y una mente joven y soñadora sentencia las reglas -el que pierda besa a su pareja- . -Baya premio disfrazado de castigo- pienso y a todos se les dibuja una sonrisa y una mirada sospechosa.
Nunca imagine que un numero me fuera a gustar tanto. ¿Como es que un dos y un uno al juntarse pueden crear dos bocas besándose y ese beso, cuatro brazos tocándose y desnudándose?. Cuatro mentes con un deseo tan creciente que no se da abasto con el cuerpo y sale de el a manera de suspiros y caricias deliciosas, sensaciones y miradas llevan consigo nuestras pasiones y dejamos de lado los burdos castigos del juego para nosotros llevar el ritmo del deseo.
A esta hora las velas ya se han consumido y quedamos solos tu y yo bajo un cielo obscuro y suave envueltos por caricias de plata. Te abrazo, me miras y preguntas:
¿Crees que soy hermosa?
- Si mucho -
¿Por que, si soy muy fea?
- La belleza es subjetiva y me encantas - respondo y te sumerges en un silencio espeso y sincero.
- ¿Tienes miedo? - pregunto.
- Si -
¿De que?
- De que me lastimen -
¿Quien?
- La gente -. y no dices mas, solo me miras.
Quiero llevarte hasta la punta mas alta de un acantilado y que solo mires el paisaje, que sientas como el viento te despeina y besa los labios. Sin tener miedo de voltear hacia abajo, sin tener miedo a una caída ahora que estamos los dos tan alto. Me besas y me quedo sumergido en tu cuerpo...
pinche!!! amo ésta entrada
ResponderEliminar